Sospechan que vertidos no domésticos están detrás de los problemas de los hedores del sistema de san

El exhaustivo estudio realizado durante las dos primeras semanas del mes de noviembre para determinar las características de las aguas residuales y su evolución a lo largo de la red del nuevo sistema de saneamiento de Riveira permitió conocer la existencia de vertidos no domésticos que podrían estar detrás de los problemas de malos olores que se vienen detectando desde agosto pasado. Así se lo dio a conocer ayer el alcalde, Manuel Ruiz, en la junta de portavoces que mantiene con carácter quincenal con los grupos de la corporación municipal, y en la que les comunicó las propuestas que el Concello solicitará a las administraciones responsables de la EDAR de Couso -Estado y Xunta- con la finalidad de dar una solución a los problemas de hedores registrados por la red conducente a la estación depuradora. Entre ellas sobresale la de que mientras persista este problema se proceda al desvío del caudal del tanque de tormentas de Pedra Pateira hacia el nuevo emisario de O Touro, prolongado hasta 3,5 kilómetros de largo y 50 metros de profundidad tras las obras realizadas y rematadas en 2015, de tal modo que no continúe por la red hasta la EDAR, lo que se piensa que va a servir para eliminar las molestias que se registran en puntos posteriores. El mandatario local les dio a conocer las actuaciones instadas por el Concello, tras conocer a mediados de agosto los episodios de malos olores, A raíz de ello, contactó con la empresa que elabora el plan de saneamiento local y redactó el proyecto de la EDAR, Eptisa, para que analizara la situación y realizase las consideraciones oportunas. Esta última recomendó que los bombeos de la red de saneamiento funcionase de forma continua, una medida que no dio el resultado esperado.

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